Investigadora del INCIHUSA busca poner en valor la obra de profesionales de la arquitectura local

Con el objetivo de dar a conocer el patrimonio arquitectónico de Mendoza un grupo de profesionales impulsa una colección de libros monográficos sobre la obra de arquitectos y arquitectas locales y sus principales aportes a la disciplina.

Isabel Durá Gúrpide, investigadora del CONICET en el grupo de Historia y Conservación Patrimonial del Instituto de Ciencias Humanas, Sociales y Ambientales (INCIHUSA-CONICET), junto a un equipo de profesionales de la arquitectura, elaboraron un libro sobre la obra de Carlos Fernando Andía, el cual aborda su trayectoria y producción arquitectónica atendiendo a sus intereses y aportes particulares, como así también una selección de sus obras más notables.

El proyecto surge con el propósito de poner en valor la obra de arquitectos y arquitectas de Mendoza y difundir su legado en el ámbito académico, profesional y público general. Se espera que se convierta en un recurso bibliográfico de interés para la enseñanza de la arquitectura en las universidades mendocinas. Según señala la investigadora, docente de Teoría de la Arquitectura de la Carrera de Arquitectura de la Universidad Nacional de Cuyo, son escasos los trabajos que documentan en detalle obras de arquitectura locales.

“El estudio y documentación de la obra de arquitectos y arquitectas de Mendoza será útil, no solo para reconstruir la historia del campo profesional, sino también como experiencias de referencia para la arquitectura actual”, señala Durá Gúrpide.

Esta colección daría inicio a un registro minucioso de proyectos destacados de profesionales de la arquitectura mendocinos, que no existía hasta el momento. El principal antecedente son los dos tomos de “Arquitectos en Mendoza. Biografías, trayectorias profesionales y obras” (tomo I / tomo II), dirigidos por la investigadora del CONICET Cecilia Raffa, y en los que participó la investigadora, que, con un enfoque panorámico, ponían de manifiesto la magnitud del patrimonio arquitectónico local. Según destaca Durá Gúrpide, aún resulta una tarea pendiente el estudio y documentación detallada de gran parte del patrimonio arquitectónico mendocino, es por esto que junto a un grupo de arquitectos vieron la oportunidad de iniciar este proyecto, que fue apoyado por el Colegio de Arquitectos de Mendoza, y comenzó con el estudio de la obra de Carlos Fernando Andía.

“La Ciudad de Mendoza tiene la particularidad de contar con un trazado relativamente joven, debido a la destrucción de la ciudad original en 1861 por un terremoto de gran magnitud. Esto implicó la pérdida de la mayoría de su edificación colonial, pero posibilitó la proliferación de arquitectura de vanguardia durante el siglo XX. Un paseo en la actualidad por la ciudad revela arquitectura de calidad, comprometida con su condición urbana y atenta a las condiciones climáticas. Se reconocen en Mendoza ejemplos de arquitectura de gran interés, poco difundidos hasta el momento, entre los que se encuentra la obra de Carlos Andía”, asegura la investigadora.

Carlos Fernando Andía estudió en la Universidad Nacional de Córdoba, donde se formó con importantes profesionales. En su extensa carrera, colaboró con su hermano, Gerardo, en el estudio Andía Arquitectos, dejando una prolífica obra construida. Fue docente en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Mendoza y en la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Nacional de Cuyo, y ocupó cargos técnicos en la administración pública, adquiriendo un amplio conocimiento de la profesión. Su obra se caracterizó por su enfoque moderno y atención al contexto y, hasta el momento, no existía una publicación monográfica que abordase su trabajo.

Para la elaboración de este documento se contó con la colaboración del propio Carlos Andía, antes de su deceso en octubre de 2021, y su hija Jimena Andía. Según detalla la investigadora se llevaron a cabo tres entrevistas con el arquitecto en las que compartió con entusiasmo su etapa de formación y sus referentes, los fundamentos de su arquitectura y las particularidades de algunas de sus obras. La selección de obras incluida en el trabajo fue realizada junto a él y suponen hitos en su trayectoria profesional. Su hija puso a disposición el equipo material original de las obras (planos, bocetos, fotografías) y otros documentos de interés conservados en el archivo de su estudio, y facilitó el acceso a las viviendas estudiadas, mediando con sus propietarios.

En el libro se destacan los valores principales de su arquitectura como son: la atención a las características de su entorno y las necesidades humanas, la articulación secuencial de sus espacios y la voluntad de expresión plástica, especialmente notable en la composición de sus fachadas. El interés de su obra no se limita al ámbito provincial: “Nos han pedido acceder al libro profesores de teoría e historia de la arquitectura de otras universidades del país debido al interés por conocer la arquitectura local”, dice la investigadora. Este trabajo supone un aporte para alcanzar una perspectiva más completa de la arquitectura moderna argentina.

 “Actualmente sigo trabajando en la línea de investigación de arquitectos y arquitectas de Mendoza. En este momento estoy estudiando y documentando, junto al Dr. Arq. Pablo Llorca, la obra de Rodolfo Sardi, con una Beca Creación del Fondo Nacional de las Artes, que esperamos que se concrete en una próxima publicación”, concluye la científica.

El equipo de trabajo que elaboró la publicación estuvo conformado por: Pedro Peña y Lillo en la coordinación y gestión; Isabel Durá Gúrpide y Pablo Llorca a cargo de la investigación y elaboración de los textos; Luis Abba y Soledad Gómez en la fotografía y, en el redibujado de planos, Bernardo Quattropani, José Andrade y Alfredo Hoop. La publicación fue financiada por el Colegio de Arquitectos de Mendoza y editada por Bisman Ediciones, reconocida editorial de arquitectura. La presentación del libro se realizó en la antigua Escuela Mitre, sede actual de la Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de la Provincia de Mendoza.