Avanzar nuestras regiones al Primer Mundo del Vino, objetivo del Catena Institute

Quienes conocen el negocio del vino y las dificultades que enfrenta ese mercado en Argentina, no pueden creer que un grupo de productores piense en un proyecto a 100 años.

Con un tipo de cambio que dificulta las posibilidades de exportación y, de ese modo, competir en pie de igualdad con otros países exportadores,en Mendoza se lanzó un instituto cuyo objetivo es la investigación, en un entendimiento con el CONICET y con la universidad.

Esta semana se lanzó el “Catena Institute of Wine”, como correlato de la experiencia que, durante más de un siglo, ha acumulado la familia Catena Zapata. Estos pioneros en la elaboración de grandes vinos en Argentina puso en manos de Laura Catena el Departamento de Investigación y Desarrollo.

El objetivo que mantiene viva la visión de la familia Catena Zapata es el de “avanzar nuestras regiones al Primer Mundo del Vino, produciendo vinos de alta calidad de terruños únicos”. El equipo que arrancó con este sueño está  dirigido desde 2007 por Fernando Buscema

y está conformado por profesionales apasionados por el vino y por descubrir los secretos de los terruños de origen. Para alcanzar esa ambiciosa meta, los investigadores del CIW trabajan en conjunto con las instituciones más prestigiosas del mundo del vino, desde la University of California, Davis hasta el Instituto de Biología Agrícola de Mendoza (CONICET).

Tanto Laura Catena (hija de Nicolás Catena Zapata) como Fernando Buscema cuentan en su team a Alejandro Vigil, un ingeniero agrónomo especialista en suelos y que hoy, es uno de los winemakers más exclusivos del mundo. Su lema es “el terruño es el único camino a la libertad”. Vigil es el chief winemaker de Catena Zapata y fue Director de I+D de 2002 a 2007.

En el lanzamiento del Catena Institute, Buscema habló del viñedo Adrianna, de la familia Catena, al que pretenden transformar en el viñedo “más estudiado del mundo”, ya que en esa propiedad se pueden encontrar tipos  de suelo bien distintos. Para eso, los convenios con el CONICET y la UNCUYO, Universidad Nacional de Cuyo, son fundamentales y necesarios, en un emprendimiento de investigación tan ambicioso.

Evocando el inicio en tierras mendocinas de su abuelo Nicola Zapata -en 1902-, Laura Catena señala: “Nos estamos preparando para los próximos 100 años de la bodega”.

Los hombres y las mujeres del vino nacional saben que este producto argentino no es tan conocido en el mundo como el fùtbol argentino, donde Lionel Messi y Javier Mascherano mandan. Pero vuelven de los innumerables viajes para mostrar y ofrecer sus vinos, que el Malbec ya es más reconocido como símbolo argentino que el tango.

Habrá que juntar a alguien más para bailar esa danza de sabores y sentidos que es el vino.

Fuente: clarín.com

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