Se realizó el acto de inauguración del Laboratorio de Análisis de Mutaciones Genéticas en Cáncer Hereditario del IMBECU
El equipamiento para el nuevo espacio fue donado por el Rotary Club Mendoza Nuevas Generaciones junto a la Fundación Rotaria de Rotary International.
Joel Salvatierra, María Eliana Bernal Sheil, Andrea Pattini, Laura Vargas Roig y Walter Manucha.
En las instalaciones del Instituto de Medicina y Biología Experimental de Cuyo (IMBECU, CONICET-UNCUYO) se llevó a cabo el acto de inauguración del Laboratorio de Análisis de Mutaciones Genéticas en Cáncer Hereditario. Espacio destinado a la detección y prevención de cáncer heredo familiar. El equipamiento y mobiliario para su funcionamiento fue donado por el Rotary Club Mendoza Nuevas Generaciones junto a la Fundación Rotaria de Rotary International.
La apertura del evento estuvo a cargo de autoridades del CONICET Mendoza y el RC Mendoza Nuevas Generaciones. “Hoy es un día de fiesta que celebra años de trabajo conjunto de un grupo importante de investigadores de nuestra comunidad, quienes creyeron en la posibilidad de aportar a la sociedad mediante un laboratorio que permitirá la detección de cáncer hereditario. Este logro es el resultado de muchos años de esfuerzo, y es una gran alegría saber que, gracias a los clubes rotarios de nuestra región, este laboratorio está en funcionamiento”, dijo Andrea Pattini, directora del CCT, y agregó: “Como investigadores, siempre trabajamos pensando en nuestra población, y este es un claro ejemplo de cómo unirnos con otras comunidades. En este caso, hemos recibido la colaboración de los clubes rotarios para abordar de manera conjunta uno de los grandes problemas de nuestra sociedad”.
Por su parte, la presidenta del Rotary Club Mendoza Nuevas Generaciones, Eliana Bernal Sheil, promotora del proyecto de equipar un laboratorio de análisis de mutaciones genéticas en cáncer hereditario para familiares sanos de pacientes con la patología confirmada y de la solicitud de la subvención ante Rotary Internacional, expresó: “Como Rotary somos un grupo, una organización internacional, que se dedica a tratar de dar soluciones a las situaciones problemáticas que se presentan. Y ese fue nuestro leitmotiv, es decir, encontramos y vimos que era un servicio importantísimo el que se le podía dar a la provincia de Mendoza, ya que no se cuenta en zona Cuyo con un laboratorio de este tipo. Este laboratorio fue inaugurado en homenaje a Daniel Mayo, instructor distrital y responsable de este sueño”.
A su vez, Walter Manucha, director del IMBECU, comentó: “Es un gran orgullo que se haya concluido esta inauguración, es un trabajo que comenzó hace ocho años. De esta manera, gracias a donaciones tan significativas como las del Rotary Club, tanto a nivel nacional como internacional, se logra concretar, con esfuerzo, un objetivo que impacta en tres niveles. Uno tiene que ver con el CONICET y su relación con la comunidad. Otro, con la salud pública. Y, por último, con la posibilidad de que esto se derrame y multiplique en nuevos proyectos. Así como el Rotary trabaja para reunir fondos y hacer donaciones de este tipo con una función social, el CONICET también tiene una función social que va más allá del conocimiento. En este caso particular, en el área de la salud, se trata de la prevención, el diagnóstico precoz y el asesoramiento a los miembros de una familia de un paciente diagnosticado positivamente, para que eventualmente puedan tomar decisiones sobre expectativas, consultas, tratamientos y recomendaciones que los ayudarán en ese proceso”.
El laboratorio cuenta con un equipo de profesionales especializados en el asesoramiento genético oncológico, estudio, metodologías y detección de genes de alto riesgo en familiares sanos de pacientes con cáncer hereditario y confirmación de mutación genética. Hasta la fecha no se contaba con un laboratorio específico para la determinación en familiares sanos. Se trata de un proyecto de alto impacto ya que se podrán extremar las medidas de diagnóstico temprano y prevención, es decir, evitar que aparezca la enfermedad utilizando medidas de reducción de riesgo, como cirugías, y aumentar significativamente las posibilidades de supervivencia y calidad de vida. Los beneficiarios son todos los familiares directos, hasta tercer grado de consanguineidad, de un paciente que posea una variante genética patogénica confirmada para todo tipo de cáncer hereditario, principalmente cáncer de mama, ovario y colon, que son los más frecuentes.
Laura Vargas Roig, directora técnica del flamante laboratorio del IMBECU, destacó: “Esta inauguración representa un cambio cualitativo en lo que venimos haciendo. Ya éramos un nodo activo de la Red Argentina de Cáncer Familiar, pero ahora no solo podremos brindar el asesoramiento clínico, sino también el diagnóstico molecular. Esto tiene un impacto en, al menos, tres áreas: en los pacientes y sus familiares, porque saber si uno es portador de una mutación, o no, le permite al médico hacer un plan personalizado respecto a los controles, lograr el diagnóstico precoz e incluso la prevención primaria, es decir, evitar que el cáncer aparezca en algunas personas. También, tiene un impacto a nivel de nuestra institución, ya que nos posicionamos como un centro de referencia en la región en cáncer hereditario, no solo en investigación, sino también en servicios. Y un tercer impacto se da en el sistema de salud. Nuestra provincia es la única que, gracias a la Ley 9055, tiene cobertura completa de los estudios genéticos cuando hay sospecha de cáncer hereditario. Y, por lo tanto, estos estudios también se podrán cubrir”, explicó la científica y concluyó: “Ojalá que otras provincias imiten esto. Han intentado, pero no es sencillo, por lo que seguimos siendo pioneros en este ámbito, y un ejemplo para todo el país”.
Para informes o consultas al laboratorio, los interesados e interesadas pueden comunicarse telefónicamente al 524-4152 o escribir el correo electrónico: asesoramientogeneticoimbecu@gmail.com. |
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